“Vale decírselo que cuando decimos “hombre”, estamos hablando de
todos
los seres humanos, sin distinción de género, color, creencia,
en fin… Es decir el ser humano como un todo, pues a Dios somos todos
iguales… De él venimos y a él volveremos.”
Artículo
1: “Queda decretado que ahora vale la vida, que ahora vale la verdad, y que de
manos dadas trabajaremos todos por la vida verdadera.”
Artículo 2: “Queda decretado que todos los
días de la semana, inclusive los martes más grises, tienen derecho a
convertirse en mañanas de Domingo.”
Artículo 3: “Queda decretado que, a partir de
este instante, habrá girasoles en todas las ventanas, que los girasoles tendrán
derecho a abrirse dentro de la sombra; y que las ventanas deben permanecer el
día entero abiertas para el verde donde crece la esperanza.”
Artículo
4: “Queda decretado que el hombre no precisará nunca más dudar del hombre. Que
el hombre confiará en el hombre como la palmera confía en el viento, como el
viento confía en el aire, como el aire confía en el campo azul del cielo.” El
hombre confiará en el hombre como un niño confía en otro niño.
Artículo
5: “Queda decretado que los hombres están libres del yugo de la mentira. Nunca
más será preciso usar la coraza del silencio ni la armadura de las palabras. El
hombre se sentará a la mesa con la mirada limpia porque la verdad pasará a ser
servida antes del postre.”
Artículo
6: “Queda establecida, durante diez siglos, la práctica soñada por el profeta
Isaías, y el lobo y el cordero pastarán juntos y la comida de ambos tendrá el
mismo gusto a aurora.”
7: “Por
decreto irrevocable queda establecido el reinado permanente de la justicia y de
la claridad. Y la alegría será una bandera generosa para siempre enarbolada en
el alma del pueblo.”
Artículo
8: “Queda decretado que el mayor dolor siempre fue y siempre será no poder dar
amor a quien se ama, sabiendo que es el agua quien da a la planta el milagro de
la flor.”
Artículo
9: “Queda permitido que el pan de cada día tenga en el hombre la señal de su
sudor. Pero que sobre todo tenga siempre el caliente sabor de la ternura.”
Artículo
10: “Queda permitido a cualquier persona a cualquier hora de la vida, el uso
del traje blanco.”
Artículo
11: “Queda decretado, por definición, que el hombre es un animal que ama y que
por eso es bello, mucho más bello que la estrella de la mañana.”
Artículo
12: Decrétase que nada estará obligado ni prohibido. Todo será permitido,
incluso jugar con los rinocerontes y caminar por las tardes con una inmensa
begonia en la solapa. Sólo una cosa queda prohibida: amar sin amor.
Artículo
13: “Queda decretado que el dinero no podrá nunca más comprar el sol de las
mañanas venideras. Expulsado del gran baúl del miedo, el dinero se transformará
en una espada fraternal para defender el derecho de cantar y la fiesta del día
que llegó.”
Artículo
final: “Queda prohibido el uso de la palabra libertad, la cual será suprimida
de los diccionarios y del pantano engañoso de las bocas. A partir de este
instante la libertad será algo vivo y transparente, como un fuego o un río, o
como la semilla del trigo y su morada será siempre el corazón del hombre.
(Thiago de Mello traducción Pablo Neruda Artículo)